En el Congreso se planteó la modificación de la Ley Universitaria porque los rectores de las casas superiores de estudios consideran que no están representadas adecuadamente ante la Sunedu. Mientras la clase política decide los cambios en la legislación, las universidades públicas como la UNSA, están semiparalizadas desde hace 33 días debido a que los docentes piden homologación de salarios con el de los jueces del Poder Judicial y que se modifique la norma que hoy rige el sistema de educación superior.
¿Considera que se requiere cambios en la nueva Ley Universitaria que fue aprobada en julio de 2014?
Creo que toda norma puede ser evaluada y mejorada y en el caso de la Ley Universitaria es necesario hacer algunos cambios porque hay errores como impedir la educación virtual.
¿Cuál es la restricción sobre este tipo de enseñanza?
En este momento la ley tiene parámetros que impiden en 50% que se lleve a cabo una educación virtual pero ello evita que en zonas rurales y comunidades donde no se puede llevar un maestro por limitaciones de tiempo y vías de comunicación se utilice internet para que se forme a los profesionales. No se debe poner límites en la formación académica.
El límite de edad para enseñar en una universidad es de 70 años ¿Está de acuerdo con ese criterio?
Es un error porque la esperanza de vida de un ser humano en el país está entre los 80 y los 90 años. Hoy en el Perú la mejor muestra de ello es que tenemos un presidente de la República que tiene más de 70 años y es parte de la administración pública.
¿Qué puede aportar en el proceso de enseñanza una persona mayor a los 70 años?
Yo creo que su experiencia profesional y personal debe ser aprovechada mientras tenga las capacidades para lograr transmitirlas.
¿Considera que el Ejecutivo no respeta la autonomía universitaria?
Es necesario que la Sunedu sea un órgano autónomo y no dependa del Ministerio de Educación, es necesario fortalecer este organismo y convertirlo en una institución sólida como la Sunat y que esté integrado por profesionales independientes, técnicos que sean capaces y tengan solvencia moral.
La ley tal cual está planteada ¿es muy restrictiva?
La norma vigente es muy reglamentarista, si se require realizar un cambio en la currícula porque se percibe una realidad y se busca mejorar la enseñanza, hay que consultarla a cada momento y ello es un factor que detiene a las universidades, más aún porque la tecnología avanza muy rápido y frente a ello hay que tener reacción inmediata.
¿La ley hace a las universidades poco competitivas?
Las restricciones en exceso no son buenas. Si nosotros queremos competir, debemos ser ágiles y tener capacidad de respuesta.
¿Cómo reconocer a una universidad chatarra?
Hay universidades que funcionan en cocheras, que no tienen calidad en el proceso de enseñanza, sus docentes no son profesionales calificados, no cuentan con laboratorios y adolecen de infraestructura adecuada para albergar alumnos de educación superior. Esas deben ser cerradas, ya han pasado dos años desde que la nueva ley entró en vigencia y hasta ahora no hay resultados para sacar del sistema a este tipo de entidades.
Una posible salida del ministro Jaime Saavedra ¿pondría en riesgo la aplicación de la Ley Universitaria?
Yo creo que no y espero que el parlamento no lo censure porque no le podemos echar la culpa de lo que aprobó el Congreso anterior y creo que él tiene la voluntad de trabajar para mejorar.
Fuente: Diario Correo de Arequipa, página 13, lunes 28 de noviembre de 2016