Raúl Diez Canseco, hombre de Acción y Popular

Por Javier Diaz Orihuela*

Un mensaje indeleble es lo que nos deja Raúl Diez Canseco Terry en su libro autobiográfico Misión Perú. Fue presentado la noche del jueves 16 en la sede de la Universidad San Ignacio de Loyola y, a la par, homenajeaba con solemnidad al cumplir setenta y siete años.

Precisamente, para tratar su proyecto onomástico-literario, me invitó a su acogedora oficina donde, entre otros detalles significativos, relucen numerosas fotografías que desvelan su afinidad con destacadas personalidades de Perú y el mundo. Con inusitado entusiasmo, me habla de su proyecto editorial y, sin más, me pide que escriba las palabras liminares. Quedo sorprendido por tan grata sugerencia. Obviamente, no podía negarme a tal petición.

Es que Raúl pertenece a la estirpe política intelectual de ascendencia arequipeña. Es descendiente del general y presidente Pedro Diez Canseco (1815-1893) y del político y diplomático don Rafael Belaunde Diez Canseco (1886-1972), famoso por su frase: “Las masas se combaten con las masas y las ideas con las ideas”. Igualmente, del presidente de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Víctor Andrés Belaunde Diez Canseco (1883-1966); y, de quien más admiraba y quería: su tío, el presidente Fernando Belaunde Terry (1912-2002).

A lo largo de mi vida, he conocido el accionar de mucha gente, pero a nadie tan involucrado en tantos quehaceres como Raúl. Es un emprendedor nato. Pocos tienen la grandeza de, con sus propias manos, construir un promisorio futuro.

A los 20 años, inició lo que sería lo central de su evangelio: la educación como el motor del desarrollo integral de la juventud. Por su temple, crea en 1968 la Academia Preuniversitaria San Ignacio de Loyola, la que, finalmente, sería la base de lo que es la corporación que hoy cuenta con cuatro sedes internacionales: EE. UU., China, Paraguay y Perú, pero con más de 320 convenios educacionales a lo largo de la orbe.

En otro plano, su apoyo al programa de las cocinas familiares que dirigía Violeta Correa, en el segundo gobierno de Belaunde (1980-1985), despertó en él la práctica política en el sentido más liberal y altruista del servicio público. Entonces, extiende su visión sobre la función pública y así acepta el viceministerio de Turismo (1984-1985).

Posteriormente, como un político al servicio del Perú, asume la tarea de reorganizar el partido de la lampa y, con el tiempo, dirige la Secretaría General de Lima Metropolitana, desde cuya plataforma apoya con entusiasmo la campaña presidencial de Mario Vargas Llosa.

En 1990 es electo diputado, en 1995 postula a la presidencia y en 2001 es electo primer vicepresidente de la República. Su gestión desde tan alta responsabilidad no pasa desapercibida al haber creado el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo, desde el cual impulsa decididamente el Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos; crea el Fondo Extraordinario para la Promoción y Desarrollo Turístico Nacional, etcétera.

Por ello y sin titubeos, Raúl Diez Canseco… ¡es hombre de Acción y Popular!

*Fundador de Acción Popular y exsenador de la República

Publicado en Expreso, 19 de enero de 2025

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